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Publicado en Política
Martes, 25 de Febrero del 2025

Karina Milei tendrá a su cargo la cobertura fotográfica y videográfica de Javier Milei

El Gobierno de Javier Milei sigue adelante con la reestructuración del Estado, eliminando cargos innecesarios y redistribuyendo funciones para hacer más eficiente la administración pública.

Ahora, con la publicación del Decreto 121/2025, se realizaron nuevos cambios en la Casa Rosada: se eliminó la Secretaría de Prensa y Karina Milei, la hermana del Presidente, asumió más responsabilidades dentro del Gobierno.




Adiós a la Secretaría de Prensa y más poder para Adorni

Desde la llegada de Milei al poder, el recorte de estructuras estatales ha sido una prioridad. En este contexto, la Secretaría de Prensa fue eliminada, una decisión que ya se venía anticipando después de la salida de Eduardo Serenellini del Gabinete. Ahora, todas sus funciones pasaron a la Secretaría de Comunicación y Medios, a cargo de Manuel Adorni, quien ya era el encargado de la difusión del mensaje oficial del Gobierno.

Con esta medida, todo el presupuesto, los bienes, el personal y las responsabilidades que antes tenía la Secretaría de Prensa ahora quedaron bajo el control de Adorni, quien tendrá mayor margen para manejar la comunicación del Ejecutivo. El objetivo es claro: reducir burocracia y hacer más eficiente la gestión.

Karina Milei, con más tareas en la Casa Rosada

Uno de los cambios más relevantes es la nueva función que asumió Karina Milei. La Secretaria General de la Presidencia ahora tendrá a su cargo la cobertura fotográfica y videográfica de todas las actividades de Javier Milei. Es decir, será la responsable de dirigir la logística y los procedimientos necesarios para registrar las apariciones del Presidente.

Esta tarea antes estaba bajo la órbita de otras áreas del Gobierno, pero ahora pasa a depender directamente de Karina, lo que refuerza su papel clave dentro del círculo de poder de la Casa Rosada. Con esta nueva asignación, además, la Dirección de Realización Audiovisual (junto con sus dependencias, como la Coordinación de Contenido Audiovisual y la Coordinación de Postproducción Audiovisual) pasan a estar bajo la Secretaría General de la Presidencia.

Más ajustes en la estructura administrativa

El decreto también reorganizó otras áreas del Gobierno. La Coordinación de Administración de Comunicación y Medios, que antes dependía de la Secretaría de la Presidencia, ahora pasará a estar bajo la Subsecretaría de Coordinación Administrativa, dirigida por Adorni.

Junto con esta transferencia de responsabilidades, se aclaró que los créditos presupuestarios, los bienes y todo el personal asociado a esta unidad también cambiarán de órbita, asegurando que la modificación no implique costos adicionales para el Estado.

Además, el Gobierno otorgó al vocero presidencial la facultad de modificar la estructura organizativa de su Secretaría, con la única condición de que no genere nuevas unidades ni aumente los gastos.

El rol de la Secretaría de Inteligencia en el nuevo esquema

Otro de los puntos destacados del decreto es que la Secretaría de Inteligencia del Estado ahora forma parte del organigrama de la Presidencia. Esta medida refuerza la idea de centralizar aún más las decisiones clave dentro de la Casa Rosada.

El objetivo es claro: mantener un control más directo sobre los temas de seguridad e inteligencia, asegurando que el Presidente tenga acceso inmediato a la información estratégica del país.

El trasfondo de los cambios y lo que significan para la gente

El Gobierno de Milei continúa con su compromiso de reducir el Estado, eliminando áreas que considera innecesarias y reorganizando las funciones para optimizar los recursos. La eliminación de la Secretaría de Prensa y la transferencia de poder a Adorni y Karina Milei marcan una consolidación del equipo de confianza del Presidente.

Para la gente, estos cambios no implican recortes en servicios ni impactos directos en la vida cotidiana, pero sí refuerzan la idea de que el Gobierno está cumpliendo con su plan de austeridad y eficiencia administrativa. Al eliminar estructuras redundantes y distribuir mejor los recursos, la gestión busca garantizar que cada peso del Estado se use de manera productiva y no en burocracia innecesaria.

Este tipo de medidas forman parte del esquema de gobierno que Milei prometió durante su campaña: un Estado más chico, menos gastos superfluos y más control de los recursos públicos. Con cada ajuste, la administración sigue avanzando en este rumbo, asegurando que el aparato estatal funcione con la menor cantidad de intermediarios posible y con una estructura más enfocada en la gestión eficiente del país.